Son tiempos de auge para las ciberamenazas, los ciberataques y los ciberdelitos. Desde el robo de identidad hasta los hackeos minoristas, estos ataques dominan el ciclo de noticias. En promedio, las víctimas de fraude gastarán $800 USD de su propio dinero y perderán 20 horas tratando de arreglar el desastre que causaron los ladrones de identidad.
Estas son algunas amenazas en curso que muestran los desafíos actuales para mantener sus datos protegidos, desde una PYME hasta un gran corporativo:
Ataques de datos minoristas
Son un peligro grave porque pueden afectar a prácticamente a cualquier persona. 2014 vio un aumento en los ataques cibernéticos contra grandes empresas como Target, con piratas informáticos que robaron 40 millones de números de tarjetas de crédito y débito de clientes.
Los ciberdelincuentes roban y venden esta información personal en el mercado negro, lo que puede conducir fácilmente al robo de identidad.
Si bien gran parte de la responsabilidad recae en el minorista, como mantener sus métodos de pago actualizados y seguros, vigilar de cerca su cuenta bancaria y el extracto de su tarjeta de crédito es una buena manera de mantenerse seguro durante este tipo de ataques.
Amenazas en tecnología de seguridad móvil y
vulnerabilidad de teléfonos inteligentes
Los ciberdelincuentes pueden explotar fácilmente las vulnerabilidades de su teléfono móvil para obtener datos privados. Estas vulnerabilidades a veces provienen de las aplicaciones que usa o dentro de su propio teléfono inteligente. Los teléfonos móviles también son vulnerables al malware, que puede registrar pulsaciones de teclas y capturar capturas de pantalla.
Protégete investigando las aplicaciones que descargas, teniendo cuidado con los correos electrónicos que abres y las imágenes que decides cargar.
Ataques de phishing e ingeniería social
Cuando los ciberdelincuentes engañan a las personas para que revelen información confidencial, como contraseñas y números de seguro social, se denomina phishing.
Una de las formas más comunes en que ocurre el phishing es cuando una persona recibe un correo electrónico, supuestamente de un banco o una organización gubernamental, y es atraída a sitios que parecen auténticos. Una vez allí, se le pide a la persona que ingrese su contraseña, números de seguro social y datos financieros. Los ciberdelincuentes toman esta información y la utilizan para sus propios fines.
El phishing es parte de un problema mayor llamado ingeniería social, que consiste esencialmente en manipular las emociones para obtener acceso a datos confidenciales.
No caigas en estos trucos. Sea escéptico con cada correo electrónico que reciba, especialmente aquellos que le solicitan que vuelva a ingresar información privada. Recuerde, los bancos reales y las organizaciones gubernamentales nunca le piden que verifique información potencialmente confidencial.
El robo de identidad
Uno de los delitos en línea de más rápido crecimiento es el robo de identidad. Muchos de los puntos cubiertos anteriormente en este artículo pueden conducir al robo de identidad, correos electrónicos de phishing y filtraciones de datos.
Sin embargo, su identidad también está en riesgo a través de materiales cotidianos como su currículum, domicilio, fotos y videos de redes sociales, datos financieros, etc. Los ladrones de identidad robarán su información personal y abrirán tarjetas de crédito y cuentas de préstamos a su nombre.
Si bien parte de esto está fuera del alcance de la persona promedio, todavía hay muchas cosas que puede hacer para mantener su identidad segura.
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